Presencia de serpientes en Colonia Yucatán.
En los años iniciales en la construcción de las fábricas de Colonia Yucatán, así como de las casas e infraestructura urbana en la década de los años 40, mucho se hablaba del peligro que representaba la presencia de culebras venenosas y no venenosas que abundaban en el nuevo asentamiento.
Seguramente esto causaba mucho temor entre los nuevos trabajadores y familiares de los mismos, pero podía más la necesidad de buen empleo y la oportunidad de desarrollarse en una nueva y desconocida comunidad, y de ese modo la mayoría de los que llegaron lograron asentarse, algunos durante toda su vida.
Se tiene conocimiento que incluso por las noches grupos de trabajadores organizados por la empresa se dedicaban en sus tiempos libres a recorrer calles, casas, edificios y las incipientes fábricas en busca de serpientes o culebras, hasta debajo de las piedras con el fin de para eliminar y controlar la abundancia de estos animales. A cambio recibían alguna gratificación económica que seguramente ayudaba a su economía familiar. No se tiene información de cuanto tiempo se realizó esta actividad, pero seguramente se logró algún tipo de control sobre este tipo de fauna que se consideraban una plaga.
La revista Frente a la Selva en su número 2 correspondiente al bimestre marzo-abril de 1950, nos ilustra con este artículo del Dr. Ríos, jefe de los servicios médicos en Colonia Yucatán.
“ Mordeduras de serpientes venenosas y su tratamiento.
Por el Dr. Daniel Ríos Macbeth
Jefe del departamento de Previsión Social.
“Uno de los peligros con que frecuentemente tropieza aquel que penetra a la selva, lo constituyen las serpientes venenosas, que si bien no abundan como muchos dicen, si las encuentra a menudo y son ya numerosas las victimas que entre cortadores de madera, chicleros y campesinos han causado en esta región. Nosotros hemos tenido oportunidad de tratar a 80 personas en nuestro servicio, teniendo que lamentar solamente la muerte de dos de ellas que fueron mordidas en el tobillo, habiendo sido lesionadas las venas de esta región. Toda vez que esta Revista se destina preferentemente a empleados y trabajadores de las Madereras y debido a que reina una gran confusión respecto a los caracteres de las especies venenosas y de las que no lo son, así como el uso de ciertos remedios y substancias en su mayoría ineficaces y nocivas, daré a continuación algunas reglas, que, si bien no son generales para todas las especies, si servirán para reconocer a las que existen por estos lugares.”
“Las serpientes pertenecen a la clase de los reptiles, orden escamados y suborden ofideos; estos últimos comprenden dos familias de serpientes venenosas, a saber: las colubrinas y las viperinas.”
“Las colombrinas existen en su mayor parte en el viejo continente y solo alguna en Nuevo Continente, como es la serpiente Coral “Coralillo” de la subfamilia Elapinas y de la que daremos una descripción que permita diferenciarla de la falsa Coral. La serpiente coralillo o coral es negra con anchas bandas carmesí más o menos en número de 17, bordeadas de amarillo, quedando por lo tanto una banda negra entre dos amarillas y siendo la primera banda de la cabeza siempre negra. A pesar de ser pequeñas, son muy venenosas. Tienen en la parte anterior del maxilar superior colmillos cortos fijos y acanalados, por cuya canaladura coree el veneno de las glándulas situadas en su base, cuando la serpiente muerde.”
“Existe otra serpiente muy conocida, la falsa Coral que no es venenosa y puede fácilmente diferenciarse, porque en esta, las bandas carmesíes están bordeadas de negro, teniendo por lo tanto una banda amarilla entre dos negras, porque la primera banda en la cabeza no es negra y porque no tiene colmillos.”
“Viperinas. Las viperinas se dividen en dos subfamilias. Las crotalinas y las viperinas, se caracterizan por tener la cabeza ancha de forma triangular y hocico achatado, cuello delgado, cola corta y sus formas de tocón y maxilar superior corto en lo que se apoyan los colmillos por medio de un hueso premaxilar que les permite dirigirse oblicuamente hacia atrás cuando la boca está cerrada y hacia delante en posición vertical cuando la serpiente abre la boca para morder, estos colmillos son largos y fuertes, perforados a la manera de agujas para inyectar, por donde descargan el veneno de sus glándulas situadas en su base: están situados hacia delante y son móviles. “
“Las viperinas son exclusivamente del Viejo Continente, mientras que las crotalinas existen en ambos continentes, pero ninguna en África. Las crotalinas se reconocen fácilmente porque tienen un agujero profundo situado entre el ojo y la ventana de la nariz. Es un agujero ciego en cuyo fondo se encuentra una membrana íntimamente ligada a fibras cerebroespinales que le permiten registrar pequeñas variaciones de temperatura que la excitan y hacen que muerda al cuerpo más caliente, me refiero a pequeñas temperaturas no mayores que el cuerpo humano.”
Las serpientes de esta subfamilia, crotalinas se reconocerán por los siguientes caracteres:
- Agujero situado entre el ojo y la ventana de la nariz.
- 2. Pupila vertical a manera de abertura.
- Cabeza triangular con cuello delgado.
- Cuerpo gruesa y cola en forma de tocón o muñón.
- Serie de escamas únicas situadas detrás del ano.
“Estos mismos caracteres los encontramos en el género Bothrops en el cual están comprendidas la Barba Amarilla, la Nauyaca o Cuatro Narices y el Huolpoch, que son en estos lugares las más comunes y a las que vamos a referirnos. Es de suma importancia la identificación de las serpiente que causó la mordedura, pues de eso depende el pronóstico y el curso del tratamiento, ya que existen varios tipos y venenos que pueden dividirse en dos casos principales: aquellos que tienen efectos predominantes sobre el sistema nervioso, produciendo parálisis de los centros cardíacos y respiratorio y de las articulaciones que se acompañan de nausea y vómito con muy poca o ninguna reacción en el sitio de la mordedura: este veneno que contiene principalmente neurotoxinas se encuentra en las serpientes que pertenecen a las familias de las Colubrinas de las cuales solo existen aquí.”
“Otro tipo de veneno es el que afecta exclusivamente los tejidos vecinos al punto de la mordedura provocando serios trastornos en el aparato circulatorio debido a sus hemotoxinas, citolisinas, endoteliolisinas, proteolisinas y sustancias coagulantes y anticoagulantes. Este tipo de venenos es el que se encuentra en las Crotalinas y Viperinas, a estas últimas pertenece el género Boyhrops en el que quedan comprendidas la Barba Amarilla, la Cuatro Narices o Nauyaca y el Huolpoch.”
Relacionado con el tema, muchos años después, o sea en 1978 llegan a Colonia Yucatán los jóvenes médicos Oscar Gutiérrez y Fernando Granados quienes a sus 23 años de edad son enviados desde las oficinas centrales del IMSS de la ciudad de México para prestar su servicio médico social como estudiantes de la carrera de medicina por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México. De quienes hablaremos en nuestro siguiente artículo.
José Antonio Ruiz Silva.
Asociación de Cronistas e Historiadores de Yucatán A.C.
Junio 10, 2023.
